Mykonos Itinerario de 3 dias: Fiesta, Sol y Playa…

Mykonos la habiamos dejado un poco de lado porque solo habiamos escuchado que era un destino caro. Yo ya habia estado en invierno y paisajísticamente, me parecía que había otras islas mejores. Sin embargo, cuando estabamos planeando nuestro viaje de Otoño, vimos un video que nos incitó a incluir Mykonos y construirnos un tinerario de 3 días, con lo esencial de esta isla: playa y fiesta. Viajamos a inicios de Octubre, lo cual nos permitió de gozar de un buen tiempo, pero siempre con mucho viento, aunque esto parece ser algo a lo que no se puede escapar en esta isla. Aquí te dejamos nuestras impresiones e ideas para un Itinerario de 3 dias a Mykonos.

Nuestra escapada a Mykonos comenzó con una llegada al mediodía al aeropuerto internacional de la isla. Desde el primer momento, sentimos el encanto de este pequeño paraíso griego. Optamos por hospedarnos en el Hotel Branco, un lugar que combina lujo y comodidad frente al mar. La primera noche la pasamos en una habitación superior, pero ya teníamos reservada una habitación deluxe con acceso directo a la piscina y la playa para las noches siguientes. ¡La emocionaba la idea de despertar con el sonido de las olas a pocos pasos!

Llegar a Mykonos es bastante sencillo. Volamos desde Atenas con Aegean , un trayecto de apenas 40 minutos. Otra opción muy popular es tomar un ferry desde el puerto del Pireo o Rafina, especialmente si vienes desde Santorini u otra isla cercana y no quieres hqcer escala en Atenas. Para trasladarnos desde el aeropuerto, alquilamos un auto y en apenas 15-20 minutos estabamos en el hotel. El paisaje desde la carretera, con sus casas blancas y vistas al mar Egeo, fue una introducción perfecta a la magia de Mykonos. Si bien debo decir que las carreteras no están tan en buen estado como en Santorini y los caminos son más bien estrechos. De hecho, El GPS nos había llevado por otra via, que nos conducia por una calle super estrecha y empinada, por lo que tuvimos que dar media vuelta y encontrar la ‘via principal’ que era un poco mejor.

Tras dejar nuestras maletas, nos cambiamos y nos fuimos enseguida a disfrutar la playa, era mediodía y el clima estaba perfecto, mucho sol, cero nubes y poco viento, al menos del lado donde estabamos. Una de las mejores cosas de visitar Mykonos en octubre es que las playas no están abarrotadas. Pasamos parte de la tarde en Platis Gialos, una playa de aguas cristalinas y arena dorada. El Hotel Branco, ubicado justo en esta playa, nos permitió disfrutar de tumbonas privadas y un buen servicio. El agua estaba a una temperatura ideal para estar ya a mediados de Octubre. Revisamos un poco el menú del restaurant del hotel pero los precios no defraudaron la fama de Mykonos de ser extremadamente cara. Los precios eran ridiculamente altos, y consideramos que era tonto gastarse tanto dinero cuando podiamos ir en auto a cualquier otro lugar y comer y beber a mejores precios.

Luego de un buen rato de playa; nos cambiamos de nuevo, y nos fuimos a comer a un lugar cercano que ya conocía Lounda Pikantiki Gwnia y donde mi esposo quedó absolutamente encantado con una excelente musaka. Es una taverna tradicional, se come muy bien y a precios bastante correctos. Para los que se aventuren a viajar en baja estacion, sera uno de los lugares que encontrarás abierto todo el año.

Luego de un breve descanso, decidimos explorar Chora, el centro de la ciudad. Las calles estrechas y empedradas, decoradas con buganvillas rosadas y puertas pintadas de colores vivos, y las iluminaciones son un ambiente perfecto para perderse. Había muchísimo viento y las callecitas nos brindaban una protección. Caminamos hasta los famosos molinos de viento, uno de los símbolos más icónicos de la isla, y admiramos la vista de la pequeña venecia de noche, pero el viento se volvía desagradable así que nos regresamos rapidamente al pueblo.

Teniamos ganas de cenar algo en el centro, y pasamos por los restaurantes del puerto viejo. Pero al final decidimos buscar algo en la via al hotel. Escogimos un poco al azar y encontramos un muy bonito restaurant en el cual nos deleitamos con una pizza llena de ingredientes griegos, acompañada de un par de cervezas locales.

En el segundo dia, volvimos al centro pero esta vez de dia, iniciamos el reocrrido al revés. Desde los molinos; nos adentramos de manera aleatoria por las callecitas del centro. Lo recorrimos todo, la verdad no es muy grande y se puede hacer en medio dia, claro si no entras en cada tienda a fisgonear. Hablo de solo darse un paseo admirando la arquitectura blanca tipica de las cicladas.

Nos fuimos a cernar en el restaurant que habiamos probado la noche anterior: Obati , porque habiamos quedado con ganas de probar otros platos. Debo decir que la cena estuvo espectacular, la calidad de los ingredientes, excelente.

Después de cenar, nos dirigimos al Tropicana Beach Club, un lugar famoso por su energía y buen ambiente. Desde la música hasta los cócteles, todo fue perfecto para disfrutar de una noche de fiesta. Aunque la isla es conocida por su vida nocturna, este lugar superó nuestras expectativas y debemos decir que igualmente nos sorprendiô gratamente por los precios. . Bailamos hasta altas horas de la madrugada, rodeados de viajeros de todo el mundo. Entre otros compartimos baile con un grupo de India super divertido.